Colombia se ha convertido en una de las selecciones de moda.
Dispuesta a dar lo sorpresa en el mundial, Pekerman, ex seleccionador argentino,
se encuentra con un equipo joven en el que solo 4 jugadores superan los 30
años. La lesión de Falcao fue un duro varapalo para los “paisa” que veían como
peligraba el mundial para su estrella. Sin embargo, pronto se noto quien tomaba
las riendas del ataque. James Rodríguez es, mientras todos rezan por el regreso
del tigre, la gran esperanza colombiana para este mundial.
James fue una de esas apuestas del gran ojeador sudamericano
en Europa: el Oporto. Tras destacar en Banfield, con el que logro el primer título
nacional para el equipo argentino, el Oporto portugués pago 5 millones por el
atacante colombiano. Pasaba a formar parte de una de las plantillas más en
forma de Europa. Con otros compatriotas como Falcao o Guarín, y jugadores que
se convirtieron en estrellas mundiales como Hulk. James gano 3 ligas y una copa
de la UEFA. Además disputo el mundial sub20 con su selección, siendo el líder y
destacando con tres goles. Tras sus 107 partidos y sus 32 goles con el Oporto,
James ficha por el multimillonario AS Mónaco. Aunque su adaptación fue
complicada, se ha vuelto un indiscutible en la media punta del equipo del
principado.
Todo apunta a que Colombia jugara con un 4-4-2, o así lo ha
estado ensayando Pekerman los últimos amistosos. A James lo veremos cómo
interior zurdo, cayendo mucho al medio y dejando la banda libre. Además es el
encargado de sacar todos los balones parados, una de sus especialidades como demostró
contra Chile en uno de los partidos clasificatorios para el mundial.
Mucha responsabilidad para un chico de solo 21 años con todo
un país a la espalda. Sin embargo juega en una selección con nada que perder y
mucho que ganar. Lo más importante para James va a ser las ganas de hacer algo
grande en Brasil.
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